Plaza Central de Valladolid: En el corazón de la ciudad, la Plaza Central de Valladolid te espera con su emblemática fuente conocida como “La Mestiza”. Es el punto de encuentro por excelencia, lleno de vida y ambiente local. Al caer la noche, los alrededores se transforman con puestos callejeros de comida, donde no puedes dejar de probar los churros o las tradicionales marquesitas. También se instalan mercadillos y, si tienes suerte, serás testigo de espectáculos de baile que capturan la esencia de la cultura local.
Iglesia de San Servacio: Presidiendo la plaza, la imponente Iglesia de San Servacio destaca por sus dos majestuosas torres y el escudo tallado en piedra del rey Felipe V, el primer Borbón en el trono de España. Construida en 1543, esta iglesia es un emblema de Valladolid. Su interior está abierto para que lo explores, un testimonio silencioso de la rica historia de la ciudad.
Palacio Municipal: No puedes irte de la plaza sin visitar el Palacio Municipal. Sube hasta uno de sus balcones y disfruta de las vistas sobre el bullicioso día a día de Valladolid. El acceso es gratuito, y desde este lugar podrás sentir la vibrante energía de la ciudad bajo tus pies. Es, sin duda, una de las mejores experiencias que vivirás en Valladolid.
Convento de San Bernardino de Siena: En el barrio de Sisal te espera otra joya histórica, el antiguo Convento Franciscano de San Bernardino de Siena. Este complejo incluye una iglesia, capillas y varios edificios que albergan un museo dedicado a la Guerra de Castas. Sumérgete en este fascinante recorrido por la historia de la región.
Cenote Zací: Para escapar del calor, no hay mejor opción que un refrescante chapuzón en el Cenote Zací, situado en pleno corazón de la ciudad. Su nombre, que significa "gavilán blanco" en maya, es un guiño al antiguo nombre de Valladolid. (Se pronuncia "Sachí"). Sumérgete en sus aguas cristalinas y experimenta uno de los mayores tesoros naturales de la región.
Casa de los Venados: Si eres amante del arte, no puedes perderte la Casa de los Venados. Este fascinante museo privado alberga una de las colecciones de arte popular mexicano más importantes del país, con más de 3,000 objetos en exhibición. Cada pieza cuenta una historia que conecta con las raíces culturales más profundas de México.